lunes, 24 de agosto de 2009

¿Pastorado femenino?

Vivimos una época en que la cultura ha deslumbrado a la “cristiandad”. En nuestros púlpitos ya no se proclama la “sola Scriptura”, es decir, la Biblia como única y suprema regla de fe, sino que ahora son la cultura y el mundo los que gozan de ese glorioso sitial y se pasean pomposamente en las congregaciones. Ya no puede decirse de los cristianos lo que antaño se dijo: “Estos que trastornan el mundo entero también han venido acá […]” (Hch. 17.6); ya que actualmente es el mundo el que trastorna a las congregaciones que se dicen cristianas.

Una de las manifestaciones más patentes del fenómeno referido es el ya comúnmente aceptado liderazgo femenino en la iglesia. Es que la emancipación civil femenina ha deslumbrado tanto al mundo, su radiación ha sido tan poderosa que ha alcanzado incluso a las congregaciones que proclaman tener a la Biblia como su regla de fe.

Con esto no estamos diciendo que el machismo sea una tendencia deseable. Ciertamente se incurrió en muchos excesos a lo largo de la historia, y el rol bíblico de la mujer tampoco fue respetado. Pero el reconocimiento de ese hecho en ningún caso debía habernos llevado a la verdadera “ginecolatría” (“culto a la mujer”, si se me permite el neologismo) que sufre la sociedad actual.

Como ya hemos dicho, este fenómeno ha impactado fuertemente a las congregaciones mal guiadas, aquellas que en sus púlpitos han dejado de escudriñar las Escrituras, y se han dejado llevar por “todo viento de doctrina” (Ef. 4:14). Dichas “iglesias” han engullido la cucharada que el mundo puso en su boca, y ahora practican incluso la ordenación de “pastoras”, algo que la iglesia apostólica no conoció.

Qué dice la Biblia al respecto

Pese a lo anterior, la Palabra de Dios sigue allí, y seguirá eternamente aunque pasen cielo y tierra (Mt. 5:18).

En efecto, la Biblia dice:

“Como es costumbre en las congregaciones de los creyentes, guarden las mujeres silencio en la iglesia, pues no les está permitido hablar. Que estén sumisas, como lo establece la ley. Si quieren saber algo, que se lo pregunten en casa a sus esposos; porque no está bien visto que una mujer hable en la iglesia. ¿Acaso la palabra de Dios procedió de ustedes? ¿O son ustedes los únicos que la han recibido? Si alguno se cree profeta o espiritual, reconozca que esto que les escribo es mandato del Señor. Si no lo reconoce, tampoco él será reconocido.” 1 Co. 14:33-38 (NVI).

De este texto podemos extraer algunas conclusiones:

1.- El contexto del pasaje referido se refiere al profetizar, que en el mismo capítulo se define como hablar a los hombres “para edificación, exhortación y consolación” (v. 3). Esto es perfectamente identificable con predicar la Palabra de Dios.

2.- Lo que Pablo sostiene en este pasaje es “costumbre en las congregaciones de los creyentes”, (lit. “Como en todas las iglesias de los santos”), es decir, es la aplicación de la enseñanza apostólica en las demás iglesias, y por la fuerza de esa autoridad Pablo compele a la iglesia de Corinto a seguir el ejemplo.

Pablo está queriendo decir con esto que la enseñanza que va a desplegar es universal, sin limitaciones geográficas, temporales ni culturales.

3.- La mujer debe guardar silencio en la iglesia, pues no le está permitido hablar. Siguiendo la ley, debe estar sumisa. Nótese que Pablo recurre a la ley como autoridad, no porque la ley ceremonial rija el culto eclesiástico, sino “Porque las cosas que se escribieron antes, para nuestra enseñanza se escribieron […]” (Ro. 15:4), es decir, podemos extraer la voluntad general de Dios a partir de la ley ceremonial, y en este caso, esa voluntad es que la mujer permanezca bajo la autoridad del hombre cuando la iglesia se encuentre reunida.

4.- Reprende a la iglesia de Corinto por creer que pueden sobreponerse al “fundamento de los apóstoles y los profetas” (Ef. 2:20), diciéndoles: “¿Acaso la palabra de Dios procedió de ustedes? ¿O son ustedes los únicos que la han recibido?”. Como iglesia nos debemos a la Escritura, no debiendo ir más allá de lo que está escrito (1 Co. 4:6), en vez de torcer la Biblia para ir acorde a la cultura.

5.- Pablo reafirma la autoridad de su discurso recalcando que es un mandato del Señor, por tanto quien se considera espiritual debe acatar lo que él está diciendo.

En tanto, otro pasaje señala:

“La mujer aprenda en silencio, con toda sujeción. Porque no permito a la mujer enseñar, ni ejercer dominio sobre el hombre, sino estar en silencio. Porque Adán fue formado primero, después Eva; y Adán no fue engañado, sino que la mujer, siendo engañada, incurrió en transgresión. Pero se salvará engendrando hijos, si permaneciere en fe, amor y santificación, con modestia” 1 Tim. 2:11-15 (RVR 1960).

También aquí podemos concluir:

1.- El rol de la mujer en la congregación no es enseñar, sino aprender en silencio y en sujeción a la autoridad.

2.- El argumento que se da como sustento no es cultural, sino bíblico: Adán fue formado primero y después Eva, y no fue Adán el que cayó primero sino Eva. Es decir, esta enseñanza no se limita a una cultura o tiempo determinado, ya que su sustento es de orden teológico-escritural.

3.- Con la parte final no se refiere a que para ser salva la mujer deba engendrar hijos, eso sería salvación por obras y además excluiría inexplicablemente a las estériles o a las solteras. Aquí “salvación” se utiliza en sentido amplio. En griego, la palabra para salvación aquí es “σώζω” (“sozo”), y según el diccionario Strong significa “salvar”, pero en el sentido de “liberar o proteger”, ya sea literal o figuradamente; “sanar, preservar, salvar (se), hacer bien, ser pleno”. A lo que se refiere es que se redime o se reivindica de su transgresión en el huerto del Edén. De hecho, la palabra utilizada aquí para “salvación” no es la misma que se utiliza para la salvación espiritual, que es “σωτηρία” (sotería) (por ej. en Hch. 4:12).

Como podemos ver, en ninguno de los pasajes anteriores se dan argumentos culturales, sino que se recurre a la autoridad de la Escritura para fundamentar que la mujer debe permanecer bajo autoridad masculina en la Iglesia. Esto es manifestación del principio general según el cual el varón es cabeza (“κεφαλή”, “kephalé”[1], cabeza en el sentido de autoridad) de la mujer en el matrimonio (Ef. 5:22-23).

Todo esto va en contra de lo que el mundo sostiene hoy, y de hecho les parece locura inconcebible, pero nuestro patrón no es la cultura mundana sino la Palabra de Dios.

Con lo anterior no se niega Gá. 3:28, que dice: “Ya no hay judío ni griego; no hay esclavo ni libre; no hay varón ni mujer; porque todos vosotros sois uno en Cristo Jesús”. Ante los ojos de Dios varón y mujer son considerados iguales, uno no vale más que el otro. Sin embargo, en cuanto a los roles son distintos, siendo el hombre autoridad de la mujer en el matrimonio y en la iglesia. Esto en ningún caso debe llevar a despotismo o autoritarismo, la mujer cristiana debe ser respetada como hija del Altísimo, un ser por el cual Cristo derramó su sangre al igual que por el varón cristiano. Pero esto no significa atribuirle roles que la Biblia le niega.

Lo dicho se demuestra en que Cristo se sometió al Padre y le fue obediente (Fil. 2:8), pero no por eso fue inferior en esencia al Padre, ya que eso implicaría que hay dos dioses, o que Cristo en algún momento dejó su estado de deidad. La sumisión no implica una calidad distinta, sino un rol distinto.

A lo ya expuesto agregamos:

1.- En los requisitos establecidos para ser obispo, se presupone que quien ostentará el ministerio es un varón. Esto dice 1 Ti. 3:2 “Pero es necesario que el obispo sea irreprensible, marido de una sola mujer, sobrio, prudente, decoroso, hospedador, apto para enseñar”. Así, el cargo es para el género masculino.

2.- Debemos recordar que Pablo estableció a Timoteo como pastor de una iglesia con el fin de que velar por la doctrina correcta (cap. 1 vv. 3-4), por tanto la carta dirigida a él contiene la sana doctrina que se debe imponer en la congregación. Es en ese marco donde se le dan las instrucciones expuestas en el número anterior.

3.- El pasaje de 1 Co. 11:2-16 sí tiene un trasfondo cultural geográfico. Más exactamente, el trasfondo de la enseñanza es universal, pero la forma en que esa enseñanza se aplica es cultural. Como expone John MacArthur en la nota de este pasaje, “Aquí el apóstol no establece una ley universal de parte de Dios, sino que solo reconoce una costumbre local que sí reflejaba un principio divino. En esa sociedad, la cabeza descubierta de un hombre era una señal de su autoridad sobre las mujeres, quienes debían mantener sus cabezas cubiertas. Si un hombre cubría su cabeza daba a entender algún grado de inversión de las funciones propias de cada género”. Es decir, si en nuestra cultura actual existiera algún símbolo de autoridad del hombre sobre la mujer, debería utilizarse ese símbolo (sólo como ejemplo, que la mujer lleve puesto un anillo). No significa que actualmente deba usarse el velo, sino que debe usarse el símbolo de autoridad que la época haya establecido, de existir éste.

4.- En la Biblia no hay ningún caso de una “Pastora” u “Obispa”, ya que como hemos visto, el cargo es masculino.

5.- La Biblia no niega completamente a la mujer el trabajar en el ministerio. Al contrario, da la posibilidad de obrar en diversos ámbitos, pero no en la predicación de la Palabra. Podemos ver la injerencia de las mujeres en la cristiandad primitiva:

  • Las mujeres siguieron y sirvieron a Jesús.
  • Las mujeres estaban entre los discípulos en el aposento alto (Hechos 1:14), fueron bautizadas por el Espíritu Santo, y hablaron en lenguas en Pentecostés (Hechos 2:17-18).
  • Las mujeres creyeron en Jesús y fueron personalmente bautizadas y perseguidas para su fe (Hechos 5:14; 8:12; 9:2; 17:4,12).
  • Las mujeres atendieron a los pobres en formas prácticas (Tabita – Hechos 9:36).
  • Las mujeres instruyeron otros con la Palabra (Tito 2:3-5; También vea a Priscila en Hechos 18:26).
  • Las mujeres profetizaron (Hechos 21:8).
  • Las mujeres pudieron haber sido diaconisas (Romanos 16:2 y 1 Timoteo 3:11).

Las limitaciones incluyeron:

  • Jesús escogió a hombres como apóstoles; en la transfiguración, la última cena, y Getsemaní, sólo estaban presentes hombres. Él nunca metió a mujeres en la posición de dirigir a hombres.
  • No hay registro de alguna mujer predicando a hombres o enseñando públicamente en Hechos.
  • No se les permitió ser ancianos o enseñar o tener autoridad sobre hombres en la iglesia.
  • Cuando surgió la necesidad de supervisar la distribución de comida, sorprendentemente siete hombres fueron escogidos.
  • Los equipos misioneros iniciales estaban compuestos por un mínimo de dos hombres.
  • La primera disputa doctrinal fue decidida por hombres.
  • El Nuevo Testamento fue escrito por hombres[2].

Conclusión

La Palabra de Dios y la historia de la iglesia son bastante claras en que el liderazgo de la iglesia, en cuanto al pastorado y obispado fue encargado al género masculino. Las voces que abogan por hacer caso omiso a las Escrituras para ir acorde a la cultura secular lo único que hacen es dar coces contra el aguijón, y preferir la sabiduría carnal y humanista antes que la revelación del único y eterno Señor. Sin embargo, aún cuando el mundo y muchas congregaciones cierren sus oídos a las Escrituras, éstas seguirán ahí por los siglos de los siglos, acusando su impertinencia y su necedad.

Se comprueba lo dicho por el apóstol Pablo a Timoteo: “Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oír, se amontonarán maestros conforme a sus propias concupiscencias, y apartarán de la verdad el oído y se volverán a las fábulas” (2 Ti. 4:3-4). Es justo lo que están haciendo en la actualidad, amontonándose maestros que les digan lo que quieren oír, aunque se están yendo junto con ellos por el camino de la destrucción, el que se aparta de las Escrituras.

No encuentro una mejor forma de terminar que citando al mismo Pablo, en su discurso a los corintios: “Si alguno se cree profeta o espiritual, reconozca que esto que les escribo es mandato del Señor. Si no lo reconoce, tampoco él será reconocido”.

Pero tú habla lo que está de acuerdo con la sana doctrina

Tito 2:1.



[1] De aquí extraemos por ejemplo “cefalea”, que es dolor de cabeza. También decimos que cuando una institución o país está sin autoridad se encuentra “acéfalo”, es decir, “sin cabeza”.

[2] Extraído de artículo de Gary E. Gilley, en blog “Evangelio según Jesucristo”, http://evangelio.wordpress.com/2009/02/03/el-papel-de-las-mujeres-en-el-ministerio-1-parte/


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Para terminar, los dejo con una enseñanza del Pastor Henry Tolopilo, del ministerio Gracia a Vosotros, acerca de este tema.





20 comentarios:

  1. No creo que sea asi de simple ¿Entonces es un pecado que las mujeres sirvan a Dios? Ya que una de las formas de definir el pecado es: Hacer lo que Dios dice que NO hagamos, y NO hacer lo que Dios dice que hagamos. La Biblia es clara al definir la jerarquia de la mujer en la iglesia, en el matrimonio entre otras, y es verdad que Dios las manda a ser sumisas, obedientes, y otras cosas que citaste, pero esto no la excluye de ser Siervas.

    Servir a Jesus es para Todos y es una Responsabilidad de cada creyente independientemente del Sexo, porque entonces todas las mujeres llegarian sin fruto delante del Señor

    Entonces Mujeres Como Katheryn Khulman, Aimee Semple McPherson, Maria Woodworth-Etter, La Reina Ester, Debora, entre algunas otras violaron deliberadamente el "orden de Dios establecido"
    Y esto apesar de que miles de almas llegaron a los pies de Jesus, o en le caso de Debora y Ester fueron libertadoras de Israel.

    En Conlusion creo que la Jerarquia de la mujer debe de estar perfectamente definida, pero es un error excluirlas de la obra de Dios, o pensar que solo sirven "para lo que sirven" sea cual sea esto ultimo.

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  2. No confundir lo escrito: NUNCA se dijo que las mujeres no puede servir a Dios. Si lees el artículo no encontrarás tal frase. Lo que sí se dijo, es que no están llamadas AL PASTORADO, que es muy distinto.

    Si reconoces lo que los textos dicen en cuanto a su rol, entonces están llamada a ejercerlo DENTRO DE LOS PARÁMETROS QUE LA BIBLIA ESTABLECE, y no según lo que la cultura nos diga.

    Por otra parte, no conozco a las mujeres que citaste, pero si ellas tomaron el púlpito o ejercieron el pastorado, CLARAMENTE violaron el orden establecido por Dios.

    En cuanto a Ester y Débora, ellas no violaron el orden establecido ya que fueron obedientes a una revelación especial de Dios. Por lo demás, lo que se trata en este artículo es la función de la mujer EN LA IGLESIA, cuestión absolutamente distinta al ámbito de Ester y Débora.

    Como dices, el rol de la mujer debe estar definido, y esa definición está dada por la Biblia. Los textos son claros, el que está en desacuerdo no tiene problemas conmigo sino con la Biblia.

    Por supuesto que las mujeres pueden ser instrumentos valiosísimos en las manos de Dios, de hecho he sido testigo de eso, pero tal ministerio debe corresponder a aquél que Dios mismo estableció.

    Un saludo fraterno, que Dios te bendiga.

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  3. Estimados Hermanos: Me vi obligado a borrar el 80% del comentario ya que hay un limite de palabras, solo les dejo un extracto)

    Expongo aquí algo distinto a lo expuesto por nuestro Hermano Alex, esperando que la discusión nos permita crecer en Fe y en conocimiento.

    (1 Co 14:33b-36)… Sorprende la incoherencia que existe entre la imposición de silencio a la mujer, y el hecho de que en 11:5 haya ordenado que la mujer ore o profetice en la asamblea con la cabeza cubierta, lo cual da por supuesto que la mujer puede orar en la asamblea.
    También sorprende la incoherencia de esta doctrina con el igualitarismo que Pablo muestra en otros textos cuando dice que en Cristo ya no hay varón ni mujer (Ga 3,27-28)-
    Tampoco encaja esta orden con el ministerio tan activo de las mujeres en las comunidades paulinas. Nos consta que fue una mujer como Priscila la que enseño a un personaje tan importante como Apolo (Hch 18:26). ¿Cómo calza esto con unas mujeres que no pueden enseñar nada sino solo preguntar a sus maridos?

    14:34 Estén sumisas como dice la Ley: También esta frase resulta rara en labios de Pablo, porque el recurso a la Ley no es muy propio de Pablo, lo cual favorece la tesis de que se trata de una interpolación postpaulina, o de la cita de una tesis mantenida por los corintios con la que Pablo no está de acuerdo.

    14:36 ¿Es que la palabra de Dios partió de vosotros?: Se trata sin duda de una pregunta retórica cuya respuesta solo puede ser negativa. Pablo está deslegitimando alguna tesis mantenida por los corintios y les dice que SUS OPINIONES NO PUEDEN SER NORMATIVAS PARA TODAS LAS IGLESIAS. ¿A qué tesis se refiere? Lo más obvio es pensar en las afirmaciones precedentes acerca del silencio de la mujer.

    El velo de las mujeres (11:2-16): Algunas cristianas acuden a las reuniones litúrgicas sin llevar la cabeza cubierta. No se trata en absoluto de una cuestión dogmática, sino cultural.
    En la ciudad de Corinto tan corrompida solo las mujeres “liberadas”, que eran las prostitutas, llevaban el pelo al aire y desordenado. En aquella sociedad se consideraba que era indecente el que las mujeres se mostraran así en público porque a muchos les daba sensación de libertinaje y de provocación. Nuevamente se trata de un conflicto entre ‘fuertes’ y ‘débiles’.
    En este caso las fuertes son las mujeres ‘liberadas’ que quieren usar de la libertad que Cristo les da para hacer gestos que escandalizan a otros varones y mujeres más timoratos. Algunas cristianas corintias, conscientes de su dignidad igual a la de los varones, porque en Cristo ya no hay varón ni mujer (Ga 3,28), empezaron a adoptar ciertas costumbres unisex de vestido y atuendo. Pablo, aun reconociendo la dignidad igual del varón y la mujer, no quiere que se elimine la diferencia externa entre ambos, que esto podría llevar a confusión y ser causa de escándalo para las personas de fuera.
    Pablo no está buscando justificaciones teológicas que diferencien los roles sociales del varón y de la mujer. Semejante actitud encierra un grave peligro de dogmatismo y fundamentalismo.
    11:3 La cabeza: La palabra ‘cabeza’ en sentido metafórico puede referirse tanto a ‘autoridad’, ‘jefe’, como a ‘origen’. En principio Pablo piensa en el hombre como origen de la mujer (1 Co 11:8) según el relato del Génesis en el que la mujer fue hecha de la costilla del varón.
    11:5 Toda mujer que ora o profetiza: Nos hemos fijado tanto en el detalle del velo, que hemos desatendido la información implícita. Cuando Pablo pide que la mujer ore (en público) y profetice con la cabeza velada, está reconociendo el derecho de la mujer a entonar oraciones y profetizar en la asamblea. Esto está en contradicción con lo que dice en el capítulo 14 cuando dice que no está bien que las mujeres hablen en la asamblea (1 Co14:34-35). Algunos han tratado de solucionar la contradicción entre 11:5 y 14:34, pensando que este último es un texto interpolado tardíamente para armonizar con 1 Tm 2:12, que es una carta deuteropaulina.

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  4. No hay tal contradicción en la palabra infalible de Dios.

    Y creo que muchos se van con la finta, en el articulo no dice que la mujer no pueda orar o proferizar, sino mas bien ejercer el obispado, eso queda claro, no por incapacidad, sino por orden,asi lo establecio Dios, ademas por su naturaleza de la mujer, es mas facil que pueda ser engañada como Eva.

    La mujer es la ayuda idonea del hombre, es un complemento, Dios dijo que no era bueno que el hombre este solo y cuanta razón siempre tiene nuestro Dios...

    Les recomiendo una serie que toca estos temas tan controversiales:

    De Casa de Oracion, la serie se llama fundamentando la familia.

    www.casadeoracionmexico.info/fundamentandolafamilia.htm

    En especial el tema 2 y 3
    Esposas llenas del Espirtu y Esposos llenos.

    Saludos.

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  5. Yo es que ni siquiera puedo argumentar. Estoy tan estupefacto que necesito una larga conversación con la primera anciana de mi iglesia, a ver si la convenzo para que se pase por aquí y aprenda lo que vale un peine. Seguro que la convenceréis de forma fácil... ¡Menuda basura machista sembráis! Esta diatriba sectaria y carpetovetónica sólo puede salir de mentes que no se han encontrado aún con Jesús de Nazareth. Diez argumentos distintos podría escribir de lo que digo. ¡Qué digo diez, cien podría! Pero es que me da mucha pereza, que con vosotros hay mucha tela que cortar. Hala, a ver si os hacéis un poquito más permeables al Espíritu que se sigue moviendo, y espabiláis por fin...

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    1. Tal como dices, BASURA MACHISTA! Las mujeres pueden llevar el mensaje donde vayan, porque hasta las piedras hablarán si Dios lo quiere. Que porquería de gente, metidas en iglesias jugando a ser "santos".

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    2. De la abundancia del corazón habla la boca.

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  6. Respuesta #1: a Juan Ramón Junqueras,

    Gracias por tu comentario. Con tus palabras graficas completamente el sentimiento del mundo hacia la Palabra de Dios y su doctrina.

    A esto se ha de haber referido el Apóstol Pablo cuando dijo: "Pero el hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no las puede entender, porque se han de discernir espiritualmente" 1 Co. 2:14.

    Si crees que los que piensan así son "mentes que no se han encontrado aún con Jesús de Nazareth", revelas tu profunda ignorancia bíblica e histórica. No vale la pena responder a tamaña aberración. La Biblia y la historia del cristianismo me avalan.

    Sobre los argumentos que ofreces, si a tí te da pereza escribirlos, a mí me da leerlos. No estoy interesado en versículos deformados y descontextualizados, pues de eso ya he visto bastante.

    Yo te invito a someterte al verdadero Espíritu, no al que se basa en sabiduría mundana y carnal, sino a aquél que escribió la Santa Palabra de Dios.

    Bendiciones

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  7. Respuesta #2: A mi hermano Miguel,

    1.- Agradezco enormemente tu respetuoso comentario, la idea de este blog es que se produzcan este tipo de conversaciones.
    2.- 1 Co. 11 es un pasaje que da instrucciones generales, mientras que el cap. 14 está ligado al orden en el culto. La mujer puede orar y proclamar la verdad a no creyentes, a niños y a otras mujeres, pero la predicación a la asamblea es encargada al varón, por lo que la incoherencia señalada no existe.
    3.- Si miras el propio cap. 11, podrás ver que aunque Pablo reconoce la igualdad en dignidad ante Dios del hombre y la mujer (v.11), atribuye al primero autoridad sobre la segunda en la iglesia (vv. 3, 10).
    4.- Las mujeres ayudaron a Pablo, pero en el marco del orden establecido por Dios. Pablo no instituyó "Pastoras". En tanto, Priscila, aunque se dice que enseñó a Apolos, no lo hizo desde el púlpito en la congregación, sino que de forma privada junto a su esposo Aquila (Hch. 18:26).

    (continúa)

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  8. (continuación de respuesta a Miguel)
    5.- Cuando Pablo se refiere a la Ley, no necesariamente la cita como regla, sino como principio que nos ilustra sobre la voluntad de Dios (a la usanza de Ro. 15:4). Por lo demás, "ley" no necesariamente se refiere al Pentateuco, ya que se utiliza también para señalar el Antiguo Testamento de forma genérica. Si vemos el mismo cap. 14, Pablo dice: "En la ley está escrito" (v. 21), pero si revisamos la cita, está aludiendo al libro de Isaías, que forma parte de los profetas y no del Pentateuco. Es decir, en el mismo capítulo nos da evidencia de que con "ley" se puede refierir al Antiguo Testamento.
    6.- Argumentar que es una interpolación es bastante peligroso, ya que pone en duda el texto completo. Se demuestra que para defender el pastorado femenino debe desacreditarse la Biblia misma. Por otra parte, no se aporta ninguna evidencia, en contraste a lo que ocurre con otras posibles interpolaciones como Jn. 5:3-4; 1 Jn. 5.7, donde se cuenta con manuscritos más antiguos y fieles con los cuales comparar, y que evidencian una añadidura.
    7.- Adscribir a la tesis de la existencia de epístolas deuteropaulinas en el canon bíblico, termina desarmando la validez de todo el nuevo testamento. No sólo es peligroso, sino que invalida las enseñanzas contenidas en dichas epístolas, que en esa hipótesis serían escritas por un impostor. Se demuestra con más fuerza aún que para defender el pastorado femenino se debe desacreditar el canon bíblico.

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  9. (continuación de respuesta a Miguel)
    8.- Sobre lo del velo, me remito a lo dicho en el artículo. Con la salvedad de que Pablo sí diferencia los roles entre el hombre y la mujer, aunque sostiene su igualdad en dignidad (vv. 8-12).
    9.- Sobre el significado atribuído a "cabeza":
    9a) En el diccionario griego de Strong no encuentro la definición de "kephalé" como "origen".
    9b) Si seguimos la tesis de que se refiere a "origen", entonces en el v. 3 se estaría diciendo que el Padre es el origen de Cristo, es decir, que Cristo es un ser creado, lo que a todas luces es erróneo. Pablo explica que tal como el Padre es autoridad de Cristo, el varón es cabeza de la mujer (v. 3).
    10.- Recalco que la Biblia no excluye a la mujer del servicio cristiano, pero sí la excluye del pastorado y la predicación a la asamblea.

    Que Dios los bendiga, gracias a Miguel por su comentario.

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  10. Estimado Hno. Alex (Quisiera dedicar más tiempo a este dialogo pero otras tareas me lo impiden)

    Solo quiero agregar unos "cortos" puntos más:
    - En cuanto dice. . . No permito a la mujer "enseñar". No se trata de una prohibición permanente... el contexto nos habla con respecto a los falsos maestros... podríamos traducir: “No permito a la mujer enseñar falsedades doctrinales en la congregación”... Lo importante es el contexto del pasaje.

    - Me gustaría que puedas definir qué significa para ti el concepto “culto” y como tú lo entiendes a la luz de las escrituras... creo que sería importante para comprender mejor tu posición sobre este tema. Cristo hablo con la mujer samaritana y esta Predico a los hombres. . . no dentro de un culto. ¿Significa la estructura física de una iglesia algo especial o con mayor significado para ti?

    - Agrego que las escrituras son las inspiradas y no los teólogos. Con esto me refiero a que las "interpretaciones" que se puedan hacer de ellas pueden estar equivocadas y hay que revisarlas (las interpretaciones) cada cierto tiempo, con las escrituras claro está. (hay cosas que obviamente no necesitan ser revisadas)

    - En resumen, sino logramos ponernos de acuerdo en este tema y en amor a los lectores que se sienten “tristes o molesto” con lo que aquí se ha expresado, puedo decir... que el cristiano sigue a Cristo y no a los hombres o a las mujeres.

    Espero que Dios me permita trabajar en la interpretación de su palabra con más dedicación, esta será mi oración y espero que me ayudes con tus oraciones.

    Que la paz de Dios llene nuestros corazones. Amen

    Dios te bendiga Alex.

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  11. Estimado hermano Miguel:

    1) En el contexto de "no permito a la mujer enseñar" no veo ninguna referencia a los falsos maestros. Pablo habla de lo que ordena a los varones en el v. 9, y luego habla de las mujeres, es decir, está aludiendo a su rol en la iglesia. Es en ese contexto que dice "no permito a la mujer enseñar". Por otra parte, sería por decir lo menos extraño que la prohibición de enseñar falsas doctrinas sea solo para las mujeres.

    2) Con "culto" me refiero a la reunión del cuerpo de Cristo para alabar a Dios y leer su Palabra. La mujer puede evangelizar (como la samaritana), pero no predicar en la iglesia, ya que el orden establecido por Dios en la Biblia entrega esa tarea al varón.

    3) Concuerdo contigo, son las Escrituras las inspiradas y no los teólogos. Debemos siempre revisar la doctrina a la luz de las Escrituras, pero hay una carga de la prueba en quien quiera cambiar la interpretación.

    Cuenta con mis oraciones así como yo lo hago con las tuyas. Que sea el Señor quien nos guíe a toda verdad en el conocimiento de su Palabra.

    Que Dios bendiga tu vida y tu matrimonio.

    Saludos fraternos en Jesucristo.

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  12. Estimado Hermano Alex, la paz de Dios este con tigo.

    Espero seguir escribiendo en tu blogs, pese a que no lleguemos a todos los acuerdos.

    Solicitud…

    Cuando menciono la palabra contexto doy por entendido que se refiere al contexto de la carta y no al contexto de un versículo que no refleja el sentido real de esta.

    1 Tim. 1:3. “Al partir para Macedonia, te pedí que permanecieras en Éfeso, para impedir que cierta gente enseñara doctrinas extrañas.” (Cierta gente)


    . . . Qué problema teológico, desde el punto de vista de la salvación, ves tú en que una mujer pueda enseñar la palabra de Dios a los hombres en el “culto”.

    ¿Está condenada la mujer a perdición junto con los hombres que oyen el evangelio de parte de ella?,

    ¿La mujer que enseña en el culto no se le debe considerar como cristiana, sino como una pecadora?,

    ¿La iglesia que es dirigida por una mujer (aunque la iglesia refleje los frutos espirituales) está totalmente condenada?,

    ¿Hay una sanción espiritual a las mujeres que enseñen el evangelio en el “culto”?

    Quisiera que indicaras cual es el problema de fondo… o es solo problema de forma.


    --- Con "culto" me refiero a la reunión del cuerpo de Cristo para alabar a Dios y leer su Palabra. (La mujer puede evangelizar (como la samaritana), pero no) predicar en la iglesia, ya que el orden establecido por Dios en la Biblia entrega esa tarea al varón---

    "culto"= Reunión del cuerpo de Cristo para alabar a Dios y leer su Palabra, donde el predicar en la iglesia, orden establecido por Dios en la Biblia es tarea del varón.

    Que tratamiento o interpretación le das a los textos:

    Mateo 18:20 “Porque donde hay dos o tres reunidos en mi Nombre, yo estoy presente en medio de ellos". (Jesús no indica distinción entre hombre y mujer)

    ¿Esto es culto? ¿Este tipo de reunión no es el cuerpo de Cristo?

    Mateo 4:21-24 “Jesús le respondió:"Créeme, mujer, llega la hora en que ni en esta montaña ni en Jerusalén se adorará al Padre. Ustedes adoran lo que no conocen; nosotros adoramos lo que conocemos, porque la salvación viene de los judíos. Pero la hora se acerca, y ya ha llegado, en que los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad, porque esos son los adoradores que quiere el Padre. DIOS ES ESPÍRITU, Y LOS QUE LO ADORAN DEBEN HACERLO EN ESPÍRITU Y EN VERDAD".

    Bíblicamente, ¿Dios está mirando con ojos inquisidores sobre quien esta predicando en el culto si es un hombre o una mujer?

    Lucas 19:40 Respondió: «Os digo que si éstos callan gritarán las piedras.»,

    No veo la intención de Jesús de censurar el evangelio en cualquiera de sus formas o genero.

    No estoy presentando una defensa hacia la participación de la mujer dentro de la iglesia. Solo creo que lo importante es la salvación que es obra de Dios.

    Saludos…

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  13. (Respuesta #1)

    Estimado Miguel:

    Sigue escribiendo con toda confianza, este espacio se escribió para eso. Con respecto a tu respuesta:

    1)Aunque hay un contexto situacional de cada libro de la Biblia, hay ciertos pasajes que no necesariamente obedecen al propósito general de la carta. Por otra parte, no se justificaría que se ordenara solo a las mujeres no enseñar diferente doctrina.

    2) El problema de que la mujer ejerza liderazgo en la iglesia y predique en el culto es que se rompe con el orden divino. No tengo otra respuesta que "la Biblia lo dice". Estimo que es suficiente respuesta entendiendo que ambos creemos en la inspiración de las Escrituras.
    Las mujeres que predican están causando tropiezo a sus hermanos, generando división en la iglesia y desobedeciendo la Palabra de Dios. Únicamente el Señor tiene la decisión sobre si se salvan o no, pero eso es lo que están haciendo quienes desobedezcan la Palabra de Dios.
    Creo que lo apropiado es lo que dice Pablo: "Si no lo reconoce, tampoco él será reconocido" (1 Co. 14:38).
    El asunto, Miguel, es de obediencia a lo revelado. Nadie sabe por qué a Dios le agradó que hubiesen Ancianos y diáconos, pero eso es lo que estableció, y es nuestro deber apegarnos a eso.

    3) Sobre textos como Mt. 18:20, me parece que es usar la Biblia para refutar a la misma Biblia. Como principio creo que es inconducente esta práctica. Es un versículo general, que no aborda el tema en específico. No habla sobre el orden y la predicación en la iglesia. Por otra parte, Mt. 18:20 se refiere a la disciplina entre hermanos. El contexto habla sobre la decisión que toma la congregación sobre un miembro que persiste en desobediencia. Con este versículo, Jesús valida la decisión que tomen al respecto 2 ó 3 que se reúnan en su nombre en este contexto.

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  14. (Respuesta #2)

    Juan 4 y los otros que citaste, nuevamente se refieren a verdades totalmente distintas. Insisto en que no se puede usar la Biblia para refutar a la misma Biblia. En Juan 4 habla de que la adoración no será más en lugares físicos, sino espiritual. Jesús enfatiza el cambio interno, y refuta la adoración externa.

    Por cierto, no se trata de censurar el Evangelio,lo que sostengo es que para obedecer a Dios no podemos a la vez desobedecerle, su voluntad es perfecta. Dios es un Dios de orden, y lo que hagamos debe enmarcarse en eso. Es inconducente que para no seguir las reglas estructurales de la iglesia, ocupemos como justificación la misma Biblia que las establece, citando textos que no hablan del tema. Lo general cede ante lo especial.

    Que Dios te bendiga

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  15. que pena que todo lo que malguien dice ya lo tildan de doctrina, entoences que pasa con las misioneras que dejan todo por el Nombre de Jesus para llevar las buenas nuevas? aquellas mujeres intercesoras' por Dios hermanos, que hay hombres tan ocupados en sus asuntos que nio hacen nada, ye s cuando Dios tiene que llaamr a la mujer a servir, El mismo dijo que hasta las piedras hablarian si nosotros callabamos, anets de que hable una piedra habla una mujer
    bendiciones
    Marener, SIERVA DEL ALTISIMO

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  16. (Respuesta a Marener)

    Primero que todo, muchas gracias por su comentario.
    Lo segundo es que si ud. lee cuidadosamente el artículo, en ninguna parte se niega a la mujer participar en las misiones e interceder por los hermanos. Lo que sí se defiende es que en la Biblia el llamado al Pastorado está limitado al varón. No podemos sacar textos de su contexto, o dar a las palabras de Jesús una extensión mayor a la que Él mismo les quiso dar.

    Bendiciones en Jesucristo.

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  17. Fantástico artículo.
    viva el cristianismo Bíblico.
    amén.

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    Respuestas
    1. Pienso que cuando encontramos en la palabra una enseñanza que confronta lo que hemos creído toda una vida, se necesita mucha humildad y valor, humildad y valor que no proceden de nosotros sino que son la obra de Dios en el corazón, para cambiar nuestras creencias por lo que la voluntad revelada de Dios en su palabra no enseña. Amados yo crecí en una congregación en que el modelo ministerial era marcadamente femenino puesto que la líder de la iglesia era una mujer, pero gracias a Dios, estudiando su palabra descubrí que esto está en contra de la voluntad revelada del Señor, hoy no tengo ningún conflicto con esto y me congrego en una iglesia que aplica el modelo bíblico de gobierno eclesiástico: ancianos piadosos con la misma autoridad y que tienen a la Biblia como la única y total regla infalible de fe y conocimiento salvadores. SOLA SCRIPTURA!

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